Las madres de hoy día trabajan fuera de casa y cuando llegan luego de un largo día, deben hacerse cargo del orden, las tareas de los niños y además la comida. En consecuencia, recurren a platos simples, comida rápida o congelada, pero de pésimo valor nutricional. Para evitar esto, existen recetas muy fáciles, rápidas y nutritivas que pueden prepararse incluso con la ayuda de los niños.