Alimentos que no deberías comprar en grandes cantidades

El afán de comprar al por mayor con tal de ahorrarnos algunas monedas puede llevar a la perdición el buen estado de los alimentos que conservamos.

Alimentos que no deberías almacenar

Es cierto que comprar al por mayor termina resultando un gran beneficio para el bolsillo, pero hay ocasiones en que lo barato también puede resultar caro a la larga. Hay veces en que invertir en grandes porciones de alimentos para salvar el dinero y tener una buena reserva puede ser contraproducente. Adquirirlos en sacos, bultos o latas gigantescas solo es recomendable si el consumo hogareño es realmente elevado, pero esto no tiene sentido si van a pasar meses almacenados. No se puede equipar la alacena como si se tratara del depósito de un restaurante.

Hay productos que se deben consumir en un tiempo breve, de lo contrario, pierden sus características y se echan a perder. Estos son algunos de los que no se debería abusar a la hora de hacer el mercado.

1Semillas y frutos secos

Aunque no lo parezca, los frutos secos como el maní o diferentes tipos de semillas tienen un elevado nivel de grasas que, si bien son insaturadas, tienden a ponerse rancias. Lo ideal sería, en caso de poseer muchos kilos, conservarlos a bajas temperaturas. No obstante, siendo realistas, muy pocos cuentan con equipos de refrigeración en casa como para almacenar cantidades exorbitantes.

2Especias y condimentos

Si bien hay especias que parecieran durar toda la vida, como la nuez moscada, hay algunas que se deterioran. Aunque no se estropean del todo, pueden llegar a adquirir sabores rancios o llenarse de microorganismos indeseados. De ahí que lo preferible sea no excederse en cantidades.

3Harina

Al igual que con las semillas, la harina, sobre todo la de trigo, no conserva sus propiedades a medida que pasan los días. Aunque se mantenga en lugares cerrados y sin humedad, es casi imposible evitar que en algún momento se torne rancia y sin textura. Una harina guardada por mucho tiempo puede atraer insectos e impedir que los panes u otros preparados hinchen adecuadamente.

4Granos integrales

Lo que hace a un grano integral, es el hecho de conservar aún el salvado y el germen. Estos tienen componentes que retienen muchos aceites, lo que es sinónimo de deterioro del sabor.

5Café

El café conservado por largos periodos de tiempo pierde las moléculas que le dan ese aroma tan particular. No solo existe el riesgo de tomar un café viejo e insípido, sino impregnado con olores de otros alimentos de la despensa.

6Aceites

No importa del tipo que sea; si es grasa, se tornará rancia inevitablemente. Ni siquiera los más sosos, como el de canola, se salvan de ese vaho tan desagradable al olfato. Es mejor ir comprando en pequeñas cantidades que tener un montón de aceite añejándose sin necesidad.

7Huevos

Muy rara vez alguien compra más de una o un par de docenas de huevos periódicamente. Pero quien lo haga probablemente podría estar incubando una buena ración de huevos viejos y podridos. Es dudoso que alguien tenga suficiente espacio en la nevera para tantos huevos; por lo que es aconsejable comprar el tradicional cartón y quedarse solo con eso.