Origen de los restaurantes étnicos
Los distintos sabores del planeta han sabido conquistar los paladares de un mundo que se hace cada vez más pequeño gracias a los avances tecnológicos de los últimos tiempos. Así surgieron los restaurantes étnicos, especializados en ofrecer sabores de los más alejados puntos del orbe.
Los distintos sabores del planeta han sabido conquistar los paladares de un mundo que se hace cada vez más pequeño gracias a los avances tecnológicos de los últimos tiempos. Así surgieron los restaurantes étnicos, especializados en ofrecer sabores de los más alejados puntos del orbe.
El proceso de la globalización ha introducido a la humanidad en un mundo que parece hacerse cada vez más pequeño. La información y el intercambio cultural se hacen a una rapidez inimaginable años atrás. Este proceso ha hecho que en cualquier ciudad del planeta sea común encontrar, simultáneamente, un restaurante peruano, otro de sushi, uno chino, una hamburguesería, un local de tacos mexicanos, etc.
Los primeros pasos
Este cosmopolitismo gastronómico que hoy resulta familiar, hace unos años atrás era impensable. Hasta mediados del siglo XIX, en gran parte de Europa se comía exactamente igual que en siglos anteriores, es decir, los campesinos y habitantes de ciudades alejadas de la metrópoli, apenas podían acceder a lo que tenían alrededor.
La transición a la dieta moderna, tal como hoy la conocemos, se inició en algunas regiones gracias a la expansión del comercio rural, el incremento de la producción agraria y al auge de la naciente industria. También hicieron su parte los nuevos medios de comunicación y transporte, como los buques trasatlánticos y el ferrocarril, además de las investigaciones en el campo de la nutrición y los métodos de conservación que, en la segunda mitad del siglo XX permitieron la introducción de alimentos refrigerados y congelados en la vida cotidiana.
De esta manera se dio el inicio de la era del consumidor moderno y de la posibilidad es establecer los más variados restaurantes. En este aspecto en particular, la primera ciudad en mostrarse receptiva a las nuevas propuestas fue Londres. En 1914, la capital inglesa contaba con una infinidad de restaurantes en formato clásico, pero según la Gourmet Guide to London, de Newnham-Davis, también existían locales en donde se preparaban platos nigerianos y malasios, consecuencia de la relación de Inglaterra con sus colonias. La publicación también hace referencia a un restaurante chino y a locales italianos del Soho londinense, los cuales habían desplazado a los restaurantes franceses.
Para Claude Fischler, autor de “El omnívoro”, esta revolución gastronómica de los restaurantes étnicos, oscila entre la fascinación por lo nuevo y el rechazo que provoca el temor a lo desconocido, entre la aceptación y la desconfianza. Aunque es evidente que, por la proliferación de estos restaurantes étnicos, lo que predomina es la atracción.
La razón más poderosa para el despegue de los restaurantes étnicos fue el turismo de masas, que se disparó en la década de 1970; la gente pudo viajar y conocer nuevas costumbres, productos y sabores. De esta manera, las primeras gastronomías en expandirse por el mundo fueron la china y la mexicana, posteriormente lo hizo la cocina japonesa, teniendo como punta de lanza al sushi. Ya entrado el nuevo milenio, surgieron los locales peruanos, al principio tímidamente, para luego arrasar furiosamente en varias ciudades del mundo.
Lo que viene
Durante algún tiempo se pensó que la próxima ola gastronómica estaría representada por los restaurantes bolivianos con sus picantes y sopas, pues La Paz es una de las ascendentes capitales gastronómicas que llama mucho la atención de consagrados chefs europeos, pero hasta el momento no se ve un crecimiento muy acelerado en la cocina de este país.
Corea, en cambio, asoma con más fuerza en el ámbito gastronómico, su crecimiento se dio de manera anónima al inicio, pero en los últimos años ha cobrado más ímpetu y va ganando cada vez más seguidores que prefieren los sabores intensos de la gastronomía oriental.