Vinos de La Rioja, España
Saborear uno de estos productos es un privilegio que llega a nuestras copas después de haber pasado por un delicado proceso artesanal de varios años
Saborear uno de estos productos es un privilegio que llega a nuestras copas después de haber pasado por un delicado proceso artesanal de varios años
La extensa zona que se ubica al norte de la Península Ibérica, desde el valle del Ebro, y que es conocida como La Rioja, en España, es también cuna de una de las culturas vinícolas más antiguas y famosas del mundo, con sus cultivos iniciados por los antiguos romanos.
La geografía de la región, marca algunas diferencias en el relieve, que los lugareños diferenciaron claramente como:
Rioja Alta
- Zona del valle: comprende Nájera, Haro y Santo Domingo de la Calzada
- Zona de la sierra: conformada por Ezcaray y Anguiano
Rioja Media
- En el valle: está la capital, Logroño
- En la sierra: se encuentra la Tierra de Cameros
Rioja Baja
- Con su valle Alfaro, Calahorra y Amedo
- En la sierra: la población de Cervera
Un suelo privilegiado
A estas tierras llegaron berones, pelendones y vascones, tras expulsar a los musulmanes, pero fueron los romanos, los que trajeron las primeras cepas y con ellas sembraron también la tradición y pasión por los vinos. Para el consumo local, al principio, las cosechas eran tan abundantes que los productores decidieron llegar hasta el país vasco con sus productos.
Con el devenir de los acontecimientos, La Rioja expandió su producción y excelencia hasta el mercado francés, y no tardó en incorporar lo más avanzado en técnicas de vinificación, obteniendo la primera Denominación de Origen Calificada (DOC), que recibió un viñedo en España, título que conserva en la actualidad, y que puede apreciarse en las etiquetas y precintas de sus botellas.
Uvas de La Rioja, tradición e innovación
El Consejo que regula la D.O.C. Rioja, permite el uso de siete variedades de uvas que se emplean tradicionalmente en la elaboración de los vinos, cuatro de ellas tintas y tres blancas.
- Variedades tintas: aquí se encuentran las uvas tempranillo (las preferidas), garnacha tinta, mazuelo y graciano
- Variedades blancas: incluyen las uvas viuras (preferidas), garnacha blanca y malvasía
A partir de 2007, el Consejo autorizó un conjunto de nuevas variedades, modificando para ello, el Reglamento de Aprobación. Son estas:
- Variedades tintas autóctonas: maturanas tinta y parda, y maturano o monastel
- Variedades blancas autóctonas: maturana blanca, tempranillo blanco y turruntés
- Variedades blancas foráneas: chardonnay, sauvignon blanc y verdejo
Clasificación de los vinos de La Rioja
Obedece al tiempo de permanencia del producto, tanto en barricas de roble, como en botellas. En ese orden, los vinos pueden ser de Crianza, Reserva, y Gran Reserva.
Vinos de crianza
- Para los tintos, el tiempo de permanencia en barricas debe ser mínimo de un año, y luego completarse otro año en botella
- Los vinos blancos y rosados, permanecen seis meses en barrica y un año en botellas
Vinos de Reserva
- Los tintos completan un tiempo de permanencia entre barricas y botellas, de treinta y seis meses como mínimo, de los cuales por lo menos doce deben ser en barricas
- Los blancos y rosados completan su tiempo en dos años, con seis meses mínimo en barricas
Vinos de Gran Reserva
- Los vinos tintos de esta clasificación, permanecen en barricas durante dos años, y pasan al proceso de envejecimiento en botellas por tres años más
- Para los blancos y rosados, el proceso total es de cuatro años, con seis meses de permanencia en barricas, y el resto, en botellas
El secreto: elaboración artesanal
Aun cuando existen en la actualidad, técnicas a un nivel industrial que facilitan y reducen el tiempo de envejecimiento, los productores de vinos de La Rioja, mantienen la tradición de siglos, para sus productos.
La madera de roble es imprescindible para lograr los rasgos que definen estos vinos, en cuanto a sabor y aroma. Con un capacidad de 225 litros, en su interior, el vino pasa por un lento proceso de micro oxigenación, durante el cual los taninos del roble transmiten su esencia, originando un sabor característico. El trasiego a las botellas con sus espacios reducidos completa el trabajo al permanecer en los oscuros ambientes de las bodegas evolucionando lentamente, hasta llegar a la categoría de joyas etnológicas.